Ya he hablado con anterioridad de saber usar el freno de servicio, que es el que accionamos apretando el pedal central,con el pie derecho y que actúa sobre las cuatro ruedas a la vez.
El freno de mano, tal como su nombre indica se usa con la mano, tirando de la palanca que hay entre los dos asientos, y que al accionarlo tensa un cable que a la vez actúa sobre las zapatas del tambor de las ruedas traseras.
Se le llama también freno de estacionamiento porque básicamente lo usamos cuando vamos a bajarnos del coche y queremos dejarlo inmovilizado y se llama de emergencia porque en el caso de fallo del freno de servicio, siempre nos queda el de mano.
También podemos usarlo en el caso de desniveles muy pronunciados en los que no estemos seguros de que el coche vaya a retroceder; entonces APRETANDO PRIMERO EL BOTÓN (ese que en la foto se ve plateado) a fin de soltar el trinquete, levantaremos la palanca hasta asegurarnos de que el coche no se mueve, luego podremos quitar el pedal del freno y empezar a acelerar; cuando notemos que el capot empieza a levantarse es cuando iremos soltando el freno y seguir la marcha. Es un detalle que conviene no olvidar porque si no se quita el trinquete, no hay manera: siempre hay que apretar primero, luego levantar y bajar.
En el cuadro de mandos se queda una luz roja encendida en cuanto se tensa un poco el freno, así que hay que asegurarse de haberlo bajado del todo al iniciar la marcha.
O ponerlo del todo, porque hay gente que aunque lleven tiempo conduciendo, son de naturaleza despistada y aunque saben qué es lo que tienen que hacer, sin ton ni son, pasan de hacerlo; yo en este caso también paso de hacer referencias a hombres y mujeres.
Hay otras personas que saben lo que tienen que hacer, pero sea por la razón que sea no quieren hacerlo ni quieren responsabilizarse de sus actos, y se las ingenian de la manera que sea con tal de que no les pillen.
Tenemos a los chulitos que les gusta "gastar goma" y que por lo que se ve,nada tiene que ver el país ni la calidad de vida, porque vaya si la gastan, la mitad de los neumáticos se queda pintando el círculo, aunque no siempre salen bien parados, alguna vez si que tienen su merecido.
Por último quedan los entendidos, que por mucho que entiendan siempre pueden tener una mala tarde,o un mecánico que no atornilló como debía de atornillar.
Fijaros en la reacción del coche cuando se le frena tan cerca de la curva (capota), sigue por el desnivel, pero al girarle la dirección, con las ruedas traseras en el aire, hace el trompo.
Es chulo para verlo, pero no para hacerlo, porque resulta muy caro, os lo aseguro.
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